google-site-verification: googleebd411669e029116.html Princesa Cactus: Mi consentida

3.1.14

Mi consentida

Hoy quiero hablaros de una personita muy especial para mí, en otra ocasión os hablé de Carmen, como bien sabéis no tengo hermanas y siempre he creído que ella es la hermana mayor que la naturaleza no me proporcionó.

Pues bien, hoy os traigo otra amiga, en esta ocasión podría decir que se trata de mi "hermana pequeña", sí, esa que tampoco la naturaleza me dio. Poquito a poco se ha convertido en una persona muy importante y especial para mí.

Es una criatura preciosa tanto por dentro como por fuera, sólo le hace falta tener más confianza en sí misma y pensar que ella es tan buena o más que cualquier otra persona.

Todo ha sido tan casual, conoces a una persona por internet, te cae bien, te echas unas risas... hasta ahí todo normal, nada que hiciera presagiar que llegaríamos a este punto; y un buen día descubres que cuando no hablas con ella sientes que te falta algo, y como buena hipocondríaca empiezas a pensar: ¿Le habrá pasado algo? ¿Estará bien? ¿Será que se cansó de mí? Y toda esa retahíla de preguntas que empieza a disparar mi mente en cuanto me descuido. 

Me gusta que me cuente sus cosas, sobre su trabajo, sus salidas, que me pida consejo, sí señores, me pide consejo, ella dice que como soy más mayor tengo más experiencia en la vida, yo pidiéndoselo a Carmen y ella pidiéndomelo a mí, lo que son las cosas ¿verdad?... Y bueno, hay situaciones en las que ciertamente tengo más experiencia, ya dice el refrán que más sabe la diabla por vieja que por diabla... Ahh ¿Que no era diabla sino diablo? Bueno pero me habéis entendido todos... sin embargo en otras no la tengo, simplemente me baso en el sentido común, que aunque hay quien se empeña en afirmar que es el menos común de los sentidos, pues siempre ayuda algo ¿no creéis?

Siempre le digo que si ella tuviera unos años más y yo no fuera asexual no la dejaba escapar, ella se ríe porque obviamente sabe que se lo digo de broma, ni ella puede ser más mayor (bueno sí, pero cuando sea más mayor la diferencia de edad seguirá siendo la misma), ni yo me voy a volver sexual de la noche a la mañana.

Hubo una serie de acontecimientos no muy buenos que precipitaron nuestra amistad, momentos duros para ella que vinieron a constatar que de todo lo malo siempre se puede sacar algo bueno.

Pero no creáis que todo es fantástico y maravilloso, noooooo, hay días en los que si la tuviera delante le arreaba dos collejas, días en los que me enfado con ella, mejor dicho en que lo intento porque no puedo prolongarlo más de cinco minutos, con lo "sargento" que yo soy, con ella no puede ser, me tiene cogido el punto y no hay manera; sin embargo hay otros días en que me la comería enterita.

Y pensar que cuando la conocí a pesar de que me caía bien me infundía mucho respeto, ahora me río, pero así fue. Hablaba poco, mantenía una actitud seria y distante, y la verdad a mí me cortaba un poquito. ¿Hasta qué punto ciertas situaciones pueden cambiar a una persona? Pues yo he podido comprobar en vivo y en directo que las cambia hasta llegar a ser su antítesis. Ahora todo es diferente, ahora es ella, habla mucho (aunque no tanto como yo, cuando se repartió la lengua me tocó hacerlo a mí, y ya se sabe que el que parte y reparte...), es cercana y cálida, y ya no me corto ni un pelo a la hora de decirle todo lo que se me pasa por la cabeza.

Es mi hermanita pequeña, mi niña mimada, mi consentida, lo más bello de este mundo...



------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Respondiendo a:

MyA: Pues sí que es divertido sí, pero lo mejor de todo es que luego se va a su casa jajaja... Me resulta divertido y novedoso porque no tengo ninguna responsabilidad con él, todo eso se lo lleva su madre. ¿Yo buena madre? Pues no lo sé y no lo sabré nunca, pero gracias por el piropo. Muchos besitos para las tres, especialmente a la princesa Judith ;)

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Buenas tardes, princesa (me siento como Roberto Benigni)
Pasaba por aquí, y como buena descendiente de extremeños que tuvo la oportunidad de vivir por esas tierras un año (echo de menos el calor...), he decidido que no está bien entrar sin llamar, ni pasarme por tu blog y no dejarte un comentario.
Sobre tu "hermana pequeña", te doy la enhorabuena. A veces creemos que no hay gente buena en este mundo, y en realidad es sólo que los malos hacen mucho ruido.
Aunque discrepo en una cosa, no creo que la gente cambie, aunque sí en la caída de escudos o barreras, que nos hacen comportarnos de un modo extraño.
Mis felicitaciones también a la chiquilla (no sé qué edad tiene, pero me ha provocado ternura), es bonito tener a alguien a quién recurrir cuando te sientes perdida.
Un saludo.

Anónimo dijo...


Que puedo decir... Si, que una serie de acontecimientos propiciaron el comienzo de una amistad que ya no tiene nada que ver con como empezó...
Fueron meses en los que con tu paciencia te ganaste poco a poco mi confianza jajaja y sabes porque te digo esto...!
El tema es que agradezco que lo hicieras... charlas, risas, confesiones, alguna lagrimas y zapatillas voladoras! Un año y medio de amistad que no cambio por nada!!!!!

Corazón de melón... todo lo malo siempre tiene algo bueno... y en esa parte, estabas tu!

Te quiero muchísimo, creo que lo sabes... =) Gracias por ser como eres. Aly.

 
Copyright © Princesa Cactus. All rights reserved.
Blogger template created by Templates Block | Start My Salary
Designed by Santhosh